PASEO DE PEREGRINACIÓN POR EL PUEBLO PESQUERO DE KIINAGASHIMA/PASEO RELAJANTE POR EL PUEBLO PESQUERO-Sumérjase en la atmósfera y retroceda en el tiempo con un guías locales
El distrito de Kiinagashima, en la localidad de Kihoku, es un pequeño pueblo de pescadores del periodo Showa lleno de puntos de interés histórico. Los visitantes pueden degustar una gran variedad de marisco capturado por los pescadores locales, aprender la leyenda del Kappa y ver el árbol de alcanfor de 1000 años de antigüedad junto al santuario de Nagashima en la ladera de la montaña. En el paseo de peregrinación por el pueblo pesquero de Kiinagashima/paseo relajante por el pueblo pesquero, los guías locales le acompañarán en un recorrido informativo mientras experimenta la historia de este museo viviente. El recorrido de 2 horas y media está disponible todo el año y generalmente comienza a las 14:00 horas (la hora de inicio es flexible). El precio es de tan solo 1,500 yenes por persona e incluye un guía de habla inglesa, una degustación de pescado local y una representación de teatro de sombras.
Sobre el autor:
Experimentar cosas nuevas y conocer gente es lo que impulsa mi pasión por viajar. En Japón siempre hay algo nuevo que probar y la naturaleza amable de los japoneses garantiza que estas oportunidades sean divertidas y educativas. Las mejores experiencias son siempre las que combinan comida, naturaleza y cultura en un solo e inolvidable día.
Japón es un país con profundas tradiciones que impregnan la cultura allá donde vayas. Cuando se va a la costa, el mar y la cultura de la industria pesquera están siempre presentes. En la prefectura de Mie hay numerosos pueblos de pescadores en los que se puede vislumbrar el pasado. Tenía muchas ganas de visitar y aprender más sobre esta cultura tradicional cuando visité la localidad de Kihoku para participar en un recorrido a pie con algunos guías locales.
Me reuní en el punto de encuentro con varios jóvenes guías locales y me llevaron en coche hasta el punto de partida de nuestro recorrido a pie en Kiinagashima, en la localidad de Kihoku. Cuando llegamos, nos acompañó el guía principal de la visita. Era un amable y enérgico tipo que se presentó en inglés como Ueda-san. Es la forma tradicional japonesa de mostrar respeto añadiendo -san a su apellido por educación. Como es habitual en Japón hacer lo mismo con los extranjeros, mi guía se dirigió cortésmente a mí como Vern-san.
El recorrido a pie nos llevaría por Uomachi ("ciudad del pescado" en español) y una de las primeras paradas fue en una pescadería tradicional, donde unas amables señoras estaban preparando pescado fresco para que lo comiéramos. Cuando entramos en la tienda, el olor era maravilloso y no podía esperar a probar algo de la pesca local.
Mientras las mujeres se ocupaban de preparar el pescado, mis guías explicaban lo que comeríamos. Me informaron de que uno de los peces era barracuda y se alegraron al saber que nunca antes lo había probado. El pescado estaba asado a la perfección y todos los especímenes eran muy sabrosos.
Pie de foto: algunos de los guías turísticos locales disfrutaron de la degustación de pescado fresco.
Nos saciamos de marisco fresco y había un ambiente maravilloso en el interior de la pequeña pescadería. Las mujeres que nos cocinaron fueron unas anfitrionas encantadoras con nuestro grupo y estuvieron encantadas de vernos disfrutar de la comida que nos habían preparado. Estábamos listos para comenzar a caminar tras conseguir nuestra saludable ración de proteínas.
Tras dejar la pescadería, caminamos junto al agua hacia el puente de Enoura. Había numerosos barcos de pesca aparcados en la bahía y me intrigó el diseño del puente. Ueda-san me explicó que era un puente levadizo de diseño único, con una sección central que podía subir y bajar en línea recta.
También me dijo que hay muchos tipos de pesca en Kiinagashima y que las variedades de peces más comunes son la caballa, el jurel, el cabracho, las sardinas y el bonito. La diversidad de peces en las aguas locales hace de Kiinagashima un destino popular para los aficionados a la pesca durante todo el año.
Justo antes de que nuestro recorrido a pie se adentrase por las calles de Uomachi, nos encontramos con una estatua de alguien que parecía importante. Era una estatua de Yugaku Hamaguchi, un conocido curandero de la zona que afirmaba ser capaz de proporcionar protección contra los malos espíritus y curar enfermedades moviendo sus manos en el aire podía.
La siguiente parte del recorrido nos llevó por las estrechas calles y pasadizos ("airo" en japonés) que atraviesan el pueblo. La localidad de Kihoku tiene muchas casas y edificios históricos, la mayoría construidos sin espacio entre ellos. Este estilo arquitectónico se utilizó para reducir los daños en los edificios en caso de terremoto.
Caminando por el pueblo, las antiguas calles estaban repletas de casas tradicionales. Mis guías hicieron una espléndida labor llevándome por un relajante viaje en el tiempo. El ritmo y el ambiente del recorrido fueron apacibles y cómodos, empapándome del ambiente de Uomachi.
Finalmente, salimos de las estrechas calles del pueblo hasta llegar al pie de la montaña al norte de la ciudad. Aquí es donde se encuentra el santuario de Nagashima, en un precioso entorno de viejos árboles, blancas puertas torii y muros de mampostería.
La estrella del santuario de Nagashima es un increíble alcanforero, del que se piensa que tiene 1000 años. El tronco del árbol tiene más de 10 metros de circunferencia en su punto más ancho. Hay también una shimenawa (una cuerda elaborada con paja de arroz) que rodea el árbol y que se cree que aleja los malos espíritus y las enfermedades. Fue una lección de humildad estar frente a este magnífico árbol, que ha resistido la prueba del tiempo durante 10 siglos.
El paseo hasta el santuario de Nagashima fue hermoso y resultó relajante estar rodeado por los viejos árboles, muros y edificios del santuario. Mis guías me permitieron sumergirme en la atmósfera y simplemente disfrutar de la soledad del espacio sagrado. Siempre disfruto de los templos y santuarios japoneses que se encuentran en el entorno natural de la zona.
Después de pasar un rato en el santuario, mis guías turísticos me llevaron de vuelta a la escalinata de entrada. Me sentí renovado tras pasar momentos de tranquilidad en el santuario. Los antiguos árboles y la serena atmósfera de la zona me habían dejado en un estado de calmada reflexión mientras pasamos a la siguiente parte del recorrido.
Nuestra siguiente parada era una casa tradicional para ver una representación teatral de sombras sobre el Kappa, una criatura del folclore japonés. La representación fue bastante entretenida y contaba la historia del travieso Kappa al que un samurái le cortó el brazo. Según la historia, Kappa recuperó su brazo y ha protegido a la familia del samurái de los accidentes desde entonces.
La casa en la que se representaba el teatro de sombras del Kappa estaba decorada con numerosos objetos tradicionales y de colección de la cultura pop japonesa. Me gustó sentarme y disfrutar de un té durante un descanso en el paseo por la ciudad. Las antiguas casas japonesas son siempre lugares maravillosos para relajarse y refrescarse con la madera y los colores naturales de los interiores.
La representación de teatro de sombras fue el final de mi recorrido y había sido un interesante y agradable día con Ueda-san y mis demás guías locales. Cuando salimos de la casa tradicional, había un simpático caballero sentado al otro lado de la calle, frente a un estanco. Nos saludamos y mantuve una agradable charla con él sobre el béisbol japonés tras fijarme en algunos artículos de los Hanshin Tigers en su tienda.
Fue el final perfecto para mi visita a este pintoresco pueblecito. Para quien esté interesado en aprender sobre la historia de los pueblos pesqueros tradicionales japoneses y comer delicioso marisco fresco, esta excursión es una maravillosa opción.
PASEO DE PEREGRINACIÓN POR EL PUEBLO PESQUERO DE KIINAGASHIMA Y EXCURSIÓN
https://wwwtb.mlit.go.jp/chubu/kankou/chiiki/glocon/kumano/kumano1.pdf
Asociación de turismo de la localidad de Kihoku
https://kihoku-kanko.com/en.html
TEL: 0597-46-3555
Email: info@kihoku-kanko.com
<Duración>
Alrededor de 2 horas y media
-Comienza a las 14:00 (puede modificarse a petición del cliente)
<Épocas de funcionamiento>
Durante todo el año
<Precio>
1500 yenes por persona
- El precio incluye: guía turístico, traductor de inglés, visita al santuario de Nagashima, degustación de pescado, representación de teatro de sombras
< Tamaño de la excursión >
De 2 a 10 personas (contacte con la empresa de viajes para grupos más grandes)
<Lugar y hora de encuentro>
14:00
Estación de Kiinagashima (línea Kisei)
-Pueden solicitarse otros lugares de encuentro a petición del cliente)
<Accesos>
Desde Tokio
- Alrededor de 4 horas en tren
- Alrededor de 6 horas en coche
Desde Osaka
- Alrededor de 4 horas en tren
- Alrededor de 2 horas y media en coche
Desde Nagoya
- Alrededor de 3 horas y media en tren
- Alrededor de 2 horas en coche